El domingo, el presidente Javier Milei desmintió cualquier conflicto con la vicepresidenta Victoria Villarruel, a pesar de la reciente tensión por la convocatoria a una sesión en el Senado que resultó en el rechazo del decreto de necesidad y urgencia 70/23. En cambio, intensificó su confrontación con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, acusándolo de “violar la propiedad privada” después de unirse a una iniciativa del diputado José Luis Espert para incitar a una rebelión fiscal en Buenos Aires.
“No estamos peleados con Victoria”, afirmó Milei sobre su relación con Villarruel en una entrevista en el programa La Cornisa, presentado por Luis Majul en LN+. “Nuestras diferencias son imperceptibles”, agregó.
El miércoles, un día antes de la sesión del Senado en la que se rechazó el DNU, la Oficina del Presidente emitió un comunicado expresando su “preocupación por la decisión unilateral de algunos sectores de la clase política que buscan avanzar con una agenda propia e inconsulta”. Villarruel había convocado el debate en el Senado sin consultar al Presidente. “Hubo una interpretación maliciosa del comunicado”, dijo Milei en la entrevista televisiva.
“Los que votan en contra del DNU son enemigos de la sociedad”, señaló. Y dejó un mensaje para los gobernadores: “Sin la ley de bases, el Pacto de Mayo no tiene sentido”.
Además de describir su relación actual con Villarruel, admitió que mantiene un contacto constante con tres funcionarios. “Interactúo mucho con [el ministro de Economía, Luis] Caputo; [la ministra de Seguridad, Patricia] Bullrich, y [la ministra de Capital Humano, Sandra] Pettovello”, dijo. Afirmó que “Bullrich es impecable” y que en Rosario se está “tomando una acción decidida”.
A diferencia de las palabras de distensión que dedicó a su relación con la vicepresidenta Villarruel, el jefe de Estado intensificó su ofensiva contra Kicillof, después de respaldar una convocatoria de Espert a no pagar los impuestos a las patentes, el inmobiliario rural y el residencial. “Kicillof viola la propiedad privada con impuestos”, enfatizó Milei.
Y argumentó que “en seguridad, la provincia es un baño de sangre”; que “los rendimientos de los alumnos son paupérrimos”, y que “el default de la provincia de Buenos Aires es grosero”.
Para criticar al senador y presidente de la UCR, Martín Lousteau, que votó en contra del DNU, el jefe de Estado recurrió nuevamente a Kicillof: “Lousteau es un incompetente sistemático, como Kicillof”. Además, lo describió como un “camaleón que busca sus ventajas”.
Durante la entrevista, también realizó una serie de evaluaciones y pronósticos económicos. “Hemos estado haciendo un ajuste del 11% del PBI”, aseguró. Y cuantificó en “50 mil” el número de empleados públicos despedidos durante su administración.
Al referirse al debate sobre una nueva fórmula para la actualización de las pensiones de jubilación (un punto que genera controversias con la oposición para avanzar en una nueva ley de bases), Milei dijo que “los jubilados, con Alberto [Fernández] ganaban 80 dólares” y afirmó: “Nuestra fórmula les permite a los jubilados recuperar un punto y medio del PBI”.
“Estamos entrando en una inflación de un dígito”, pronosticó, días después de que se conociera el registro de febrero, de 13,2%. Agregó que “la salida del cepo está más cerca”, y profundizó: “Con 15 mil millones de dólares, abro el cepo”.
El Presidente también defendió el cierre del Inadi (“cancelaba a los que pensaban distinto”, dijo) y de la agencia Télam (aseguró que “era un mecanismo de propaganda política”).
Con información de La Nación