Se cumplen ocho años desde que el grito de Ni Una Menos se escuchó en todo el país a través de las voces miles de mujeres que coparon las calles con una consigna colectiva que se instaló en la agenda pública y que desató un activismo social sin precedentes. Sin embargo, a pesar de los avances que generó el movimiento, la violencia contra las mujeres y los femicidios no cesaron.
La Oficina de la Mujer (OM) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación difundió esta semana la actualización del Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina (RNFJA) correspondiente al 2022, año en el que se registraron 252 víctimas letales de violencia de género. La cifra de femicidios se mantuvo prácticamente igual al 2021 (251).
Desde aquel histórico 3 de junio de 2015, en Marcos Paz la problemática se reflejó en cuatro casos que evidenciaron la vigencia de la violencia machista contra las mujeres y de los femicidios. El recuerdo de Vanesa Carreño, Cristina “Beba Rodríguez”, Katy Dargel, Ada Patricia Alvarez Gaviria que, como tantas otras mujeres, hoy son el símbolo de una lucha que continúa: #NiUnaMenos
Vanesa Carreño
El mediodía del 12 de febrero de 2021, Vanesa Carreño fue asesinada de 13 puñaladas por su ex pareja, Carlos Soruco Fernández, en su vivienda ubicada en El Malacara y Reilly. Luego atacarla delante de sus hijos de 5 y 3 años, Soruco Fernández escapó.
Esa misma tarde, el femicida fue capturado y confesó el crimen. Un día después, fue hallado muerto en la comisaría 1ra. de Mercedes, donde esperaba para ser indagado.
El asesinato de Vanesa fue el femicidio número 46 del 2021; al momento de su muerte, en el país ya había más femicidios que días transcurridos.
Cristina «Beba» Rodríguez
La noche del 18 de mayo de 2019, Cristina Noemí «Beba» Rodríguez participaba del festejo del cumpleaños de 15 de su nieta mayor en el salón «Peto Eventos», ubicado en el cruce de avenida Rivadavia y Feijoo, cuando su ex esposo, Hugo Orlando Ibarra, apareció en el lugar y comenzó a discutir con ella. Bajo esas circunstancias, la mujer recibió un disparo en la cabeza efectuado a corta distancia que le provocó la muerte en el acto.
Ibarra fue condenado el 9 de noviembre de 2021 a cadena perpetua por el asesinato. El fallo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de la ciudad de Mercedes recayó sobre el acusado por haber sido considerado culpable de asesinar a Cristina Noemí “Beba” Rodríguez, con quien tuvo dos hijas y estuvo casada durante 28 años.
Según el veredicto, Ibarra fue considerado autor del “homicidio agravado por el vínculo, por haber mediado violencia de género y por la utilización de arma de fuego”.
Katy Dargel
El 14 de febrero de 2019, en su vivienda ubicada en Callao al 1800, Catalina Dargel fue atacada a golpes y con un hacha por su pareja, Pedro Sosa, con quien tenía una hija en común. Tras el crimen, la enterró en un descampado y se entregó a la policía.
Sosa se presentó en la seccional con un bolso que tenía el hacha usada para cometer el femicidio y dijo que trasladó el cuerpo en el baúl de su auto hasta un campo privado, situado en cercanías de la cárcel de Marcos Paz. Allí los efectivos encontraron a la mujer envuelta con un nylon y una alfombra, que a su vez estaban atadas con cuatro trozos de alambre.
El 4 de marzo de 2021, a poco más de dos años del femicidio, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 del Departamento Judicial de Mercedes, a cargo de los jueces Patricia Guerrieri, Fabián Brahim y Luis Laserna, condenó a cadena perpetua a su asesino.
Los femicidos de “Beba” y de “Katy” fueron dos de los 252 en total que se cometieron en el país en 2019.
Ada Patricia Alvarez Gaviria
El 24 de agosto de 2015, Ada Patricia Alvarez Gaviria fue degollada y apuñalada por su pareja Darío Alvarez Ramírez tras una pelea en su vivienda ubicada en la calle José C. Paz 260, en Marcos Paz.
El hecho se reveló alrededor de las 15 horas de ese día cuando un hombre, que vivía en una casa del fondo de ese mismo lugar, se presentó en la comisaría de Marcos Paz para denunciar que encontró a su cuñada y la pareja de ella heridos, ambos de nacionalidad colombiana.
El médico policial que constató la muerte de Alvarez Gaviria informó que, a simple vista, la víctima estaba degollada y que presentaba al menos 10 puñaladas y varios golpes.
Por su parte, el atacante presentaba una puñalada en el estómago y otra en el pecho. La presunción de los investigadores es que luego de asesinar a su mujer intentó suicidarse clavándose el mismo cuchillo que empleó para cometer el crimen, pero sobrevivió.
Fernando Gigena