El consumo de carne vacuna tuvo una caída promedio anual del 2,7% entre marzo de 2022 y el mismo mes del año pasado, de acuerdo con la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (CICCRA).
“En términos interanuales se observó una disminución (del consumo de carne vacuna) de 2,7%, que llega a 12% cuando se contrasta con los 12 meses finalizados en marzo de 2019″, precisó el último informe de la entidad vinculada a la industria de las carnes.
En esa línea, detalló que durante marzo pasado “el promedio móvil de 12 meses señaló un consumo aparente de carne vacuna por habitante de 47,7 kilogramos anuales”.
El detalle del informe de CICCRA demuestra que fue el alza de los precios en los cortes más consumidos en nuestro país lo que provocó este cambio forzado de hábito en la mesa de los argentinos. El asado, de hecho, subió más del 200% desde febrero de 2020, prepandemia.
“En lo que respecta a los precios al consumidor, en Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el alza de 6,7% del nivel general conocido recientemente fue similar a la que registraron los principales cortes de carne vacuna relevados por el INDEC”, indica.
“Los que subieron más fueron paleta, cuadril y nalga, con una suba promedio de 7,9% mensual. En el caso del asado la suba fue de 5,8% y en el de la carne picada común fue de 4,0%”, agrega.
Y amplía: “En tanto, según el INDEC, el pollo fue el que registró un gran salto durante el tercer mes del año, ubicándose su precio 15,1% por arriba del promedio de febrero. Esto fue una recuperación relativa, ya que como se verá a continuación en la comparación interanual el ritmo de aumento del precio del pollo no resultó muy diferente de los verificados en los precios de los principales cortes vacunos”.
CICCRA detalla que “entre marzo de 2021 y marzo de 2022 la nalga y el cuadril registraron aumentos de 63,3% y 62,5%, respectivamente, seguidos por la paleta (59,5%), carne picada común (57,5%) y asado (57,3%). En el caso del pollo, la variación interanual fue de 58%”.
“Por último, al contrastar con febrero de 2020, que fue el último mes completo prepandemia/‘cuarentena’, los precios del asado y de la nalga se triplicaron, acumulando subas de 206,8% y 202,1%, respectivamente (4,6% y 4,5% equivalente mensual)”, puntualiza la Cámara.